Por fin llegó la siguiente entrega de los siempre interesantes Douglas Preston y Lincoln Child, como no, acompañados de su principal personaje: el agente especial Pendergast.En esta ocasión, los autores nos llevan en un principio hasta el lejano Nepal. Allí nos encontramos a Pendergast, acompañado de su pupila: Constance Greene, a la que ha llevado a un viejo monasterio budista con la intención de que los monjes ayuden a sanar el alma de la joven, herida esta por los acontecimientos ocurridos en la anterior novela de los autores: "El libro de los muertos". Durante su estancia en el templo, el lama del mismo informa a Pendergast de que una sagrada reliquia les ha sido robada: el terrible Agoyzen, que, de no ser encontrado, podría destruir el mundo.
Como no podía ser de otra manera, el agente especial Pendergast les ofrece su ayuda, y parte a la búsqueda del Agoyzen y de su ladrón. La persecución les lleva hasta el transatlántico Britannia, un moderno Titanic que hace la ruta entre Londres y New York. Durante la travesía, y mientras Pendergat trata de averiguar la identidad del hombre que posee la terrible reliquia antes de que pueda usarla para destruir el mundo entero, comienzan a suceder una serie de extraños y terribles crímenes cuya resolución será clave para recuperar el Agoyzen.
Como suele ser habitual en las noveles de Preston y Child, no hay lugar para el aburrimiento durante el tiempo que se lee el libro. El ritmo es continuo, rápido y, en ocasiones, vertiginoso. Los acontecimientos se suceden unos tras otros, sin que dé tiempo a calmarse entre ellos. Aunque, en honor a la verdad, me queda la impresión de que esta novela está un poco por debajo en cuanto a intriga y suspense respecto a las anteriores, algo comprensible teniendo en cuenta lo emocionante de estas. Lo que no quiere decir que se pase un gran rato durante su lectura.
Para los seguidores de las historias de Pendergast, comentar que en esta ocasión sólo veremos a dicho personaje y a su pupila, quedando el resto de habituales relegados para otra novela. Y, al final de "El Círculo Oscuro", se nos revela un importante hecho sobre uno de los dos personajes que aparece, que obviamente no revelaré. :)
Para los no seguidores, informar de que la primera novela de Preston y Child fue "El relicario", libro a partir del cual se hizo la película "The Relic", donde los guionistas de Hollywood, en otro alarde de originalidad y trabajo "bien hecho", suprimieron el personaje de Pendergast, quien, como ya he comentado anteriormente, es el protagonista principal de las novelas de los dos autores.
